Aves, Naturaleza y Ecoturismo
Wild Punta del Este y Capitán Sacapoco Tours (participante del Programa de Ecoturismo para la Conservación, PEC) en el Área Protegida Laguna Garzón
Hace unos días realizamos una jornada completa de birding en la Laguna Garzón junto a Capitán Sacapoco Tours. Unos días antes, para nuestra sorpresa, habíamos registrado más de 100 especies de aves sin mayores esfuerzos. Decidimos volver con el objetivo de realizar un relevamiento más exhaustivo, pero sin que esto nos impidiera disfrutar del entorno, los ambientes naturales asociados a la laguna y otros componentes de la biodiversidad local. En definitiva, la gran mayoría de los interesados en la observación de aves silvestres como producto turístico valoran todos estos aspectos, tanto o más, que una larga lista de especies. Con un día espectacular a nuestra disposición, pudimos completar todos nuestros objetivos.
Antes de empezar establecimos algunas pautas. Una vez que llegáramos al lugar escogido solo haríamos recorridas a pie. Primero nos enfocaríamos en las aves del bosque y matorral psamófilos que tienden a estar más activas temprano en la mañana para luego dirigir la atención a las aves acuáticas, más fáciles de detectar a lo largo del día en el espejo de la laguna. En línea con el tipo de birding que promocionamos desde el PEC, el uso de la técnica del playback estaba descartada. Además de llevar un listado general de todas las aves observadas (así como de otros animales), nos propusimos registrar la hora precisa en que detectáramos por primera vez a cada especie. La actividad empezó muy temprano, al amanecer. La lista comenzó con un Playero Menor Patas Amarillas (5:05) y terminó con un Gaviotín Chico a pocos metros del registro inicial (16:52).
De regreso, y una vez cargados los datos a una planilla electrónica, la información recabada reveló algunos patrones interesantes. Durante la primera hora de observación sumamos, en promedio, más de una especie/minuto (67 aves en total). A las 7:07, un Martín Pescador Grande (hembra) en un montecito de Ceibos al borde de la laguna permitió llegar a las 100 aves. Para las 8:00 ya habíamos acumulado más del 85% (¡117 especies!) de todas las aves que observaríamos durante la jornada (nos percatamos de la inusual diversidad con un conteo rápido en la pausa para el almuerzo). Durante el resto de la jornada solo pudimos agregar unas pocas aves más, pero varias de ellas particularmente disfrutables como la Pajonalera Pico Recto (09:40; cantando en un parche de Caraguatá), el Aguatero (15:30) y el Rayador (15:32).
Otro dato interesante fue el vinculado al tipo de registro, visual o aural (vocalizaciones). En los relevamientos de aves, en especial en ambientes de bosque, por lo general hay un número importante de especies que son registradas únicamente a través de sus cantos. En este caso, nos sorprendió que solo dos especies no fueron registradas visualmente: la Cachirla Chica (05:53) y el Titirí (09:29). Muchas otras fueron detectadas inicialmente por sus voces, pero luego fueron también avistadas a lo largo de la jornada. Este es otro aspecto relevante desde la perspectiva turística ya que los observadores de aves suelen valorar más los registros visuales que los auditivos.
También vinculado al potencial turístico, cabe destacar la presencia de numerosas especies carismáticas (el foco principal para los birders en los segmentos del mercado conocidos como “ocasionales” y “entusiastas”), como por ejemplo el Ñandú (05:20), la Pava de Monte (06:21), el Chajá (05:39), el Cisne Cuello Negro (05:14), el Coscoroba (05:06), el Flamenco Austral (05:49), la Cigüeña Común (05:19), la Espátula Rosada (05:37) y 12 especies de patos (05:10-16:08).
El foco general en las aves no nos impidió disfrutar del entorno, en especial de la costa de la laguna y de las fantásticas muestras de matorral y bosque psamófilos, estos últimos con gran cantidad de Palo de Fierro y cactus en flor. También pudimos observar varios mamíferos incluyendo la Mulita, el Zorro Gris y decenas de Nutrias. Cerca de la desembocadura del arroyo de la Cruz, un Lobito de Río observándonos a corta distancia detrás de unos juncos, fue uno de los registros especiales del día. Al mediodía almorzamos disfrutando a la distancia de la actividad de una colonia de Gaviotas Capucho Café, muchas acarreando material para construir sus nidos. Las voces de las gaviotas se mezclaban con un coro de Ranas Criollas.
Una lista de más de 130 especies para una sola jornada no es usual, en especial para una recorrida a pie. Nos hizo pensar sobre los atributos naturales de la Laguna Garzón que generan una de las concentraciones de especies de aves más diversas de todo el país (tal vez la más diversa). Esto está relacionado principalmente a la heterogeneidad ambiental. La gran variedad de hábitats (incluyendo muestras de los principales tipos de ambientes pampeanos: pastizales, humedales y bosques) en un área relativamente pequeña es el factor clave.
En definitiva, el Área Protegida Laguna Garzón presenta condiciones ideales para la observación de aves silvestres (y el ecoturismo en general), con la posibilidad de generar propuestas de altísimo valor y calidad. El estatus de área protegida permite, entre otras cosas, contar con un cuerpo de guardaparques del SNAP (Sistema Nacional de Áreas Protegidas) avocado a tareas de sensibilización y control. Según opinión de pobladores locales, esto ha resultado en una reducción significativa de actividades que atentan contra la conservación de la biodiversidad como la caza furtiva y la tala ilegal del monte nativo. Una gran ventaja para la observación de aves en general y para el “birding turístico” en particular.
¡Desde Wild Punta del Este y el Programa de Ecoturismo para la Conservación seguiremos promocionando los valores de nuestro departamento apostando por un Maldonado con su potencial natural intacto!
Wild Punta del Este (https://www.wildpuntadeleste.com)
Capitán Sacapoco - Ecoturismo: 099 040523
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